Los Seguros se han convertido hoy en día en algo necesario con lo que convivimos en nuestras familias y en nuestras actividades profesionales. Elegir un buen seguro no es solo algo que se deba dejar al factor precio. Hay otros factores como el servicio posterior al siniestro, por ejemplo, donde una persona descubre en muchos casos, si acertó o no al contratar su seguro.
Y es que el trato personal y la independencia en los seguros es una pieza clave y eso lo saben bien los Corredores y Corredurías de Seguros.
INDEPENDENCIA:
Rasgo diferenciador y único de los Corredores de seguros pues NO mantenemos relaciones o vinculaciones contractuales con las Compañías Aseguradoras que supongan afección de ningún tipo con ellas, lo que garantiza nuestra TOTAL INDEPENDENCIA y nuestra TOTAL IMPARCIALIDAD a la hora de seleccionar para nuestros clientes las opciones que consideramos más adecuadas a sus necesidades en cada momento.
AMPLITUD DE OFERTA: ACCESO A TODOS Y LOS MEJORES PRODUCTOS DEL MERCADO PORQUE TRABAJAN CON TODAS LAS ASEGURADORAS
“Un corredor, todas las compañías”. Los Corredores de Seguros podemos ofrecer a nuestros clientes productos de cualquier Compañía de Seguros que opere en el Mercado. El Corredor va a buscar siempre para su cliente la MEJOR OFERTA DEL MERCADO, no solo en precio sino también en coberturas Y ello porque tiene acceso a las mejores opciones del mercado en cada momento.
SEGURIDAD: CONTROL Y SUPERVISIÓN DE LA ACTIVIDAD POR PARTE DE LA DIRECCIÓN GENERAL DE SEGUROS
Los Corredores estamos regulados y supervisados por la DGSGFP, estamos inscritos en el Registro Obligatorio y debemos enviar ANUALMENTE a la DGSFP toda nuestra información. Esta es la mejor garantía de SEGURIDAD Y TRANSPARENCIA al asegurado.
La nuestra es una actividad permanentemente supervisada y controlada por la Administración.
ASESORAMIENTO PERSONALIZADO:
Los Corredores de Seguros analizamos el mercado antes de ofrecer al cliente la mejor oferta. Los Clientes no tratarán con máquinas ni con grabaciones, sino con personas que les escuchan, atienden y asesoran. En definitiva, los Corredores y Corredurías de Seguros ofrecen un trato muy cercano que hace que los clientes tengan otra consideración distinta sobre los seguros de la que tiene mucha gente. Es en el momento del siniestro cuando los Corredores se encuentran más próximos a sus clientes.
CUALIFICACIÓN Y FORMACIÓN.
Las personas y empresas que tienen sus seguros con un Corredor o Correduría saben que los tienen con un profesional debidamente cualificado y formado. Hoy en día la normativa les exige la previa obtención de un Título especial para desarrollar esta actividad con una formación mínima de 500 horas.
GESTIÓN EFICAZ Y PROFESIONAL EN LA TRAMITACIÓN DE LOS SINIESTROS
En caso de siniestro, un asegurado que tenga sus seguro con una Correduría, SOLO TIENE QUE LLAMAR AL CORREDOR y éste se va a encargar de gestionar absolutamente todo lo relacionado con el siniestro, incluida la función de DEFENDER LOS DERECHOS E INTERESES DE LOS ASEGURADOS ante la compañía. (Representa al asegurado ante la aseguradora y está de su parte)
Y TODO ESTE SERVICIO ES SIN COSTE PARA EL ASEGURADO
Una póliza de seguros contratada directamente con un 902, directamente con la compañía, por internet…, es decir, sin la intervención de una Correduría profesional, tiene el mismo coste que contratada directamente con la aseguradora sin la intervención de una Correduría, pero a diferencia de la contratada con un Corredor o Correduría, no cuenta con los anteriores valores y ventajas que sí tiene el cliente que tiene sus seguros con un Corredor.
El Corredor asiste al asegurado y se encarga de todo cuando ocurre un siniestro
Una Correduría de Seguros trabaja para buscar y conseguir los seguros que mejor se adapten a las necesidades de sus clientes, gestionando y negociando con las aseguradoras la contratación definitiva de los mismos. Pero además, y esto es muy importante, también asiste, asesora y ayuda a sus clientes en todos los trámites y gestiones posteriores, especialmente en caso de producirse un siniestro, defendiendo sus intereses para que las Entidades Aseguradoras cumplan con sus obligaciones según los términos y condiciones acordados en su Contrato de Seguro.