Hasta un 50 % de reducción en la cuantía de las indemnizaciones. Esa es la cifra que los letrados han determinado en los primeros tres meses de la entrada en vigor de la normativa sobre este tipo de compensaciones.
Una nueva norma desconocida para la gran mayoría de las víctimas, ya sean leves o graves, y que está siendo aprovechada por las aseguradoras para cerrar unas indemnizaciones muy por debajo de lo que se pagaba hasta el 31 de diciembre de 2015.
La ley que regula esas cantidades expresa la necesidad de adaptar las indemnizaciones a la legislación europea, pero también expresa el objetivo de proteger a las víctimas, a la parte débil en este caso de siniestros.
Por tanto se recomienda no dejar pasar el plazo de 72 horas después de un accidente para que la víctima que tenga intención de reclamar una indemnización civil se ponga en manos de un médico.
El facultativo debe realizar el correspondiente diagnóstico, lo más preciso posible. Sin ese informe podría resultar imposible que prosperase cualquier acción en el ámbito de la jurisdicción civil.